"Por el año 1908, en una cabaña, en el bosque, alejado de todo. Vivía un señor llamado Fred. Pasaron los años y en 1930, en un pequeño pueblo cerca de aquel bosque, había una Iglesia. Luisa, una niña de 12 años y su familia, todos los domingos acudían a aquella Iglesia. Un día, a Luisa le llamó la atención el movimiento de una de las cruces que estaban colgadas en la Iglesia...". Este señor, vivía solo. No tenía, familia ni amigos. Se cree que había fallecido, pues, nunca más se supo de él.
"En la quietud del bosque y el misterio de la Iglesia, destinos entrelazados guardan secretos centenarios."
Es una leyenda parecida a la anterior, y también está extendida por todo el mundo. En ella, una mujer vestida de blanco aparece durante un breve periodo de tiempo en alguna zona rural. Su historia suele estar relacionada con alguna tragedia de carácter local. Son mujeres que han perdido a hijos, maridos o han sido víctimas de una traición y su espíritu vaga sin descanso clamando venganza.
En el medievo, cuando esta fantasmagórica figura aparecía significaba que alguien cercano, de la familia o del vecindario, iba a morir. En la tradición inglesa, la Dama de Blanco custodiaba un tesoro, pero murió repentinamente, antes de que pudiera revelarle a nadie dónde se hallaba escondido. Cuentan que en el siglo XIX la dama blanca se apareció hasta tres veces al hijo de los dueños del castillo de Blenkinsopp en Northumbria, pero es cierto que en esa parte de Inglaterra todos los castillos tienen sus leyendas de fantasmas. La dama Blanca en Gales también guarda un tesoro. Cuando un hombre tuvo el valor de acercarse a ella, le recompensó con la mitad. En su avaricia, él se lo llevó todo, pero la Dama de Blanco reaccionó, y con sus poderes sobrenaturales, mató al codicioso abusón
En la capital madrileña también hay una dama de blanco que, noctámbula y sin asomo de vértigo, se pasea de noche por el techo de la casa de las Siete Chimeneas en la Plaza del Rey. Se trata de Elena, hija de un montero de Felipe II y supuesta amante del rey que pereció en extrañas circunstancias y que, según varios testigos, sigue deambulando por la villa y corte. Pero por las alturas.
se quedo quieta varios minutos observando su alrededor, si darse cuenta que por detras personas difrazadas de monstruos se le acercaban a ella para tomarla de los brazos para incapacitarla. Ella aterrada empezo a gritar al ver sus mascaras horrendas de monstruos que despredian un olor a putrefacción. Con temor intento escapar de los brazos de monstruos disfrazado pero....
Comenzó a gritar, porque en el lugar que apareció era una clase de universo alterno en donde todos asesinaban a todos, y en ese lugar era matar o morir...
Entoces, en el suelo encontró algo medio enterrado, y era un collar que decía "Tuenti". Al principio no sabía que quería decir, pero después recordó que las cosas que tienen escritas "Tuenti" son de mucha ayuda, ya que te da suerte. Así que la tomó, y cuando apenas la tocó se teletransportó a su mundo; No lo podía creer, estaba aliviada, hasta que...
Se dió cuenta que lo que se acercaba era otro portal y está vez este portal la llevó a un universo donde todos tenían súper poderes la gente pasaba volando, estirándose, pegando saltos enormes, o apareciendo y desapareciendo como si nada...
En medio de tanta confusión y miedo 😨 despertó en su cama en un abrir y serrar de ojos dándose cuenta de que todo fue un orrible sueño, sueño que .....
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Pasaron los años y en 1930, en un pequeño pueblo cerca de aquel bosque, había una Iglesia.
Luisa, una niña de 12 años y su familia, todos los domingos acudían a aquella Iglesia.
Un día, a Luisa le llamó la atención el movimiento de una de las cruces que estaban colgadas en la Iglesia...".
Este señor, vivía solo. No tenía, familia ni amigos. Se cree que había fallecido, pues, nunca más se supo de él.
😵😵
Es una leyenda parecida a la anterior, y también está extendida por todo el mundo. En ella, una mujer vestida de blanco aparece durante un breve periodo de tiempo en alguna zona rural. Su historia suele estar relacionada con alguna tragedia de carácter local. Son mujeres que han perdido a hijos, maridos o han sido víctimas de una traición y su espíritu vaga sin descanso clamando venganza.
En el medievo, cuando esta fantasmagórica figura aparecía significaba que alguien cercano, de la familia o del vecindario, iba a morir. En la tradición inglesa, la Dama de Blanco custodiaba un tesoro, pero murió repentinamente, antes de que pudiera revelarle a nadie dónde se hallaba escondido. Cuentan que en el siglo XIX la dama blanca se apareció hasta tres veces al hijo de los dueños del castillo de Blenkinsopp en Northumbria, pero es cierto que en esa parte de Inglaterra todos los castillos tienen sus leyendas de fantasmas. La dama Blanca en Gales también guarda un tesoro. Cuando un hombre tuvo el valor de acercarse a ella, le recompensó con la mitad. En su avaricia, él se lo llevó todo, pero la Dama de Blanco reaccionó, y con sus poderes sobrenaturales, mató al codicioso abusón
En la capital madrileña también hay una dama de blanco que, noctámbula y sin asomo de vértigo, se pasea de noche por el techo de la casa de las Siete Chimeneas en la Plaza del Rey. Se trata de Elena, hija de un montero de Felipe II y supuesta amante del rey que pereció en extrañas circunstancias y que, según varios testigos, sigue deambulando por la villa y corte. Pero por las alturas.
Así que la tomó, y cuando apenas la tocó se teletransportó a su mundo; No lo podía creer, estaba aliviada, hasta que...